lunes, 14 de septiembre de 2009

Sobreactuaciones.


(La Madre - Vsevolod Pudovkin (1926))

Que la ley de medios es un hecho importantísimo, no me cabe duda. Que hay que estar, poner el cuerpo, bancar hasta que se sancione, tampoco. Pero por estos días, me asustan ciertas sobreactuaciones, ciertas expresiones desaforadas, no ya desde la vereda de la oscuridad, es decir, desde los opositores a la ley, que francamente ya suenan absurdas y rozan la delincuencia intelectual..
Lo que me preocupa, son las expresiones de éste lado, de quienes la defendemos, la consideramos necesaria, ya, aquí y ahora.

He leído y escuchado la expresión “Esta es la madre de todas las luchas” A la mierrrda! Si esta es la madre de todas las luchas, para los sectores progresistas, digamos (con perdón de la palabra) qué queda para la reforma agraria? Con esta ley no se modifican las relaciones de producción, ni la educación, ni la salud, ni siquiera se relaciona con el mayor bienestar de los jubilados, o el mejoramiento de las condiciones laborales de todos los trabajadores.
Esta ley, primero es una ley, es decir, un marco regulatorio,… letra muerta que después habrá que reglamentar, e implementar. (Hay tantas leyes sancionadas que jamás se han implementado!) Pero aceptando la importancia de la sanción de la ley, el enfermizo debate por cada uno de los términos, artículos y cláusulas es agotador. Una vez sancionada, cualquier ley puede ser posteriormente y parcialmente modificada.
Aquí la cosa es: o queremos modificar el statu quo, la organización y posesión monopólica de los medios, la falta de pluralidad en las voces e imágenes, y en última instancia, modificamos la vergonzante vigencia de una ley de la dictadura, o abrimos el juego e intentamos…eso, intentamos, porque nada garantiza que realmente se democratice el discurso, que el tercio de las voces de las organizaciones intermedias exprese un contradiscurso (y no un discurso alternativo), que se construyan productos de calidad, que la programación invite a la reflexión, al diálogo, al aprendizaje…. Intentamos, pero tambien tenemos que exigir, que dentro de las nuevas condiciones abiertas por este marco regulatorio, se haga algo distinto, creativo, democratizador, con contenido… A Tinelli no lo vemos cuántos? Cuántos somos los que no nos tragamos el verso de TN, canal 13, y todos los satélites , que peleamos con la pantalla, o directamente apagamos la tele o la radio?Sólo se modifica con la ley esta situación?
Por supuesto que tener medios democráticamente administrados, con discursos múltiples, ayuda, pero no sólo con eso…

Por otro lado, también me preocupa la batalla por la palabrita, por el nombre. Otra pelea por el chiquitaje.
También he leído y visto pequeños entredichos por llamar correctamente a la ley: “Se llama Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual” Ahá….”Llamarla por su nombre es apropiarse de su contenido, quien nombra, en cierta medida domina….” Ahá….
Se me ocurría hacer la analogía con un supuesto proyecto por la despenalización del aborto. Pensaba: si le ponen la ley de la interrupción quirúrgica de un embarazo riesgoso o no deseado, por ejemplo….eso significa que no tenemos que hablar más del aborto? Que cualquier mujer que vaya al hospital va a pedir turno para hacerse una interrupción quirúrgica de un embarazo riesgoso o no deseado? (tache lo que no corresponde, dirá en el formulario)
No es desarraigar, deshistorizar una lucha, un reclamos de 25 años? Cuando en los 80, por ejemplo, se reclamaba, se organizaban reuniones, charlas, jornadas, se escribía y discutía por la ley de radiodifusión, qué se hacía, no estábamos hablando de esto mismo? Todas las discusiones de los últimos años, que no se hacían por la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, sino a lo sumo, por una ley de medios, no cuentan? Porque si aceptamos que ese es el nombre, y dejamos de lado otras formas de nombrar lo mismo, rechazamos también esa historia, la de la Coalicón, la de los 21 puntos….Es decir, le volvemos a hacer el juego al enemigo, aceptando con ellos que esto es una cosa improvisada, a las apuradas…”no ves, si ni siquiera se ponen de acuerdo en cómo nombrarlo!!!!” Esta es una ley que se viene gestando desde mucho tiempo atrás, tiene antecedentes, tiene discusiones, tiene propuestas que datan de tres décadas atrás. No hay improvisaciones, no hay caprichos. Hay necesidades. Es importantísimo que se sancione, pero teniendo en cuenta el lugar que ocupa. No es la madre, tal vez la tía o la prima de algunas luchas. No sobreactuemos, no escupamos al cielo….

No hay comentarios: